Turning Pro 1 El vicio de las regatas

0. El vicio de las regatas

Dicen que las regatas a vela son el deporte de los reyes, que es el vicio de los millonarios. Poder participar en un deporte contra el mejor de la especialidad es algo que no se puede hacer en ningún otro. Pero hay que prepararse mucho y gastar dinero, pero el chorro de adrenalina que se obtiene tras una buena salida es algo que solo se consigue tomando las decisiones correctas en la ceñida o en una buena empopada. Pero además se puede regatear por poco dinero si se elige un monotipo de vela ligera.

Para ganar hay que reunir una serie de condiciones y hechos que si no se consiguen lo hacen casi imposible, los más importantes son los siguientes: (Ver en el siguiente capítulo más sobre el Progreso)

• Tener un buen barco

• Tener la obra viva limpisima

• Usar las velas correctas y nuevas

• Pesar lo menos posible

• Tener viento limpio

• Conocer muy bien el Reglamento de Regatas de Vela, el RRV

• Optimizar el ráting

• Hacer las maniobras rápidamente y sin errores

En estos apuntes se incide en el Reglamento y las maniobras. Es de suma importancia la posición del barco respecto a los demás, sobre todo para obtener viento limpio, principal motor del velero. Respecto al rating, la principal regla es que hay que bajarlo, pero sin sacrificar ni un ápice de velocidad. Es más, un poco más de ráting pero con un aumento sustancial de velocidad es deseable. Ese es el equilibrio.

Recordar que la máxima numero 1 de las regatas es:

Aquel que comete el menor número de errores gana.

I. Las posiciones desfavorecidas.

Ir detrás, o por las aletas de otro barco es estar penalizado en velocidad, tanto en la capacidad de obtener viento limpio como por el esfuerzo en pasar por una estela más turbulenta. Si además estamos a barlovento de él, nuestra situación es peor porque le da derecho a maniobrar y tendremos que mantenernos alejados de él.

II. La posición favorecida a sotavento

Si bien a sotavento es generalmente estar desfavorecidos, porque el de barlovento nos quita el viento limpio, hay una posición concreta que, si tenemos que pasar cerca de otro barco, pasa a ser muy favorecida.